lunes, 8 de marzo de 2010

Redrado y su autoanálisis

"Hemos cumplido con las metas de estabilidad financiera, estabilidad de precios y previsibilidad cambiaria" repetía Redrado en cada respuesta otorgada en el programa Hora Clave del domingo pasado.
Ante la pregunta sobre si la responsabilidad de la acumulación de reservas correspondía a Kirchner o a él, respondía que el BC habia sido totalmente independiente durante su mandato, siguiendo siempre deciciones totalmente profesionales.
Luego,cuando le preguntan si el 20% de inflación actual es culpa suya responde: "si ustedes toman la politica fiscal del 2003 con superávit primario del 4,5% y le aplican las políticas monetarias y cambiarias del BC durante mi gestión, la inflación sería sin dudas de un dígito".

A cualquier persona no economista, estas respuestas le dejan la impresión de que Redrado hizo todo bien.
Ahora desmenuzando sus respuestas para analizarlas mejor, nos damos cuenta de que las cosas no fueron tan así.

En primer lugar, el superávit que acumulo el BC y que le permitió atesorar semejante nivel de reservas para luego permitirle a Redrado jactarse de haber sorteado con éxito 4 corridas (crisis del campo en 2008, caida del Lehman, estatización de AFJP y crisis internacional), se hizo en un contexto de exportaciones idédito.

Es decir, si la soja no hubiera explotado como lo hizo (y como nunca sucedió en los '90 por ej), Redrado no hubiera tenido ese poder de fuego, y su gestión hubiera sido mucho mas ajetreada.

Esto es un hecho exógeno, Redrado no hizo nada para acumular reservas, mas que comprarlas con pesos, que luego se suponían eran esterilizados en su totalidad.

La respuesta de la inflación es muy buena. Llegué a pensar que tenía razón. Sin dudas Redrado tiene buena labia.
Pero si el dice haber realizado en el BC una coordinación de políticas monetarias con las políticas fiscales, y además, su función es mantener el valor del peso (controlando la inflación), me pregunto si era tan díficil realizar una política monetaria contractiva para atenuar los efectos inflacionarios del exceso de gasto de Kirchner, en el que Redrado se escuda.

Seguramente una política monetaria de ese tipo hubiera apreciado nominalmente el peso, pero si contribuía a bajar la inflación lo primero no debería ser un problema serio a mediano plazo.

No me parece una mala gestión la de Redrado, pero pongamos las cosas en su lugar. Ni es un groso por haber evitado 4 corridas ni tampoco lo es por no haber hecho nada para bajar la inflación.

martes, 2 de marzo de 2010

A Di Tella

Comienza una nueva etapa de vida académica. Luego de casi 1 año de haber terminado la licenciatura en la UNLP, y tras un largo tiempo de escudriñar distintas alternativas, he decidido arrancar, junto con dos viejos amigos (Tincho Y Gero), la maestría en Economía en Di Tella.
Expectante por lo que está por venir y dispuesto a dar todo para mejorar, escribo tan solo para dejar registro del comienzo de este nuevo desafío y así recordarme las implicancias de asumirlo.

jueves, 11 de febrero de 2010

¿Por qué privatizar?

Shleifer et al. (1996), muestran que las privatizaciones son una estrategia eficaz para que un gobierno reformista (e.g, Margart Tatcher, Carlos Menem, etc.) impida el uso ineficiente de los recursos públicos por parte de aquellos políticos que en el futuro intentarán conseguir votos mediante el mantenimiento de un alto nivel de empleo en las empresas públicas.
El modelo desarrollado por estos autores parte del supuesto de que independientemente de que el gobierno privatice o no, éste siempre tendrá una porción de las acciones de la firma y por lo tanto de su flujo de caja. A su vez, se supone que la empresa privada es siempre mas eficiente porque en ella no hay intereses contrapuestos como sí los hay en las empresas públicas donde el objetivo de maximizar el nivel de empleo colisiona con el de maximizar beneficios.
Ahora, la empresa privatizada tiene los derechos de propiedad para elegir el nivel de empleo que deseé, por lo tanto, el político maximizador de empleo (y de votos) deberá subsidiar a la firma por mantener el nivel de empleo alto, de forma de compensarla por la caída en sus beneficios que esta ineficiencia implica. La vía que tiene el político de obtener los recursos necesarios es utilizando la parte de beneficios que le corresponde como accionista residual de la empresa privatizada ó, pidiéndole fondos al tesoro para otorgar subsidios.
Sin embargo, los costos de estas dos fuentes de financiamiento son distintos. Por un lado, si el gobierno utiliza los beneficios que le corresponden es menos probable que el Tesoro reclame una parte para sí porque éste no inspecciona a la firma y por lo tanto no sabe cuanto dinero está ganando ni consecuentemente cuanto le corresponde. De esa forma, el político puede usar parte de esos beneficios residuales a un costo político bajo. Por otro lado, los distintos ministerios compiten para obtener subsidios del Tesoro por lo que el costo político de pedir dinero es más alto.
Ahora estamos en condiciones de explicar la principal conclusión del modelo. Bajo propiedad estatal, el político elige un nivel de empleo alto a cambio de una caída en los beneficios de la firma pero esto tiene un costo relativamente bajo, ya que se refleja en menores ingresos del Tesoro, quien se supone no tiene idea de la potencialidad de la firma para obtener mayores beneficios. La clave de privatizar está en que eleva el costo político de financiar un comportamiento ineficiente.
Ahora, el costo político sube porque, además, se deben obtener fondos del Tesoro (que a su vez debe subir impuestos o reducir el gasto para conseguirlos), para compensar a los accionistas privados por aceptar un alto nivel de empleo en su firma. Este costo se incrementa cada vez mas cuanto mayor es la participación de los accionistas privados. La razón de esto es que el alto nivel de empleo reduce en mayor cuantía el beneficio de los accionistas y en que como ahora el Estado posee menos participación en la distribución de dividendos, tiene menos margen para utilizar los beneficios residuales debiendo usar en mayor medida los subsidios, políticamente mas costosos, del Tesoro.
La conclusión del modelo, por lo tanto, es que las privatizaciones serán mas eficaces en evitar gastos ineficientes de los políticos cuanto mayor sea el porcentaje del paquete accionario transferido y cuanto mas costoso sea obtener subsidios del Tesoro. Los autores agregan entonces, una política monetaria restrictiva como mecanismo para dificultar aún más el funcionamiento ineficiente de las empresas de servicios públicos. Por lo que vemos que las privatizaciones estan justificadas desde el lado de la eficiencia del gasto, y de la calidad de los servicios (se reduce el problema de principal agente) y de la mejora en la institucionalidad y por lo tanto en la transparencia de la economía.
El problema del proceso en Argentina fue del grado de cobertura social de los servicios privatizados. En los 90' la calidad de los servicios mejoraron como norma general, pero en la mayoría de los casos las renegociaciones de tarifas dejaron a muchos potenciales consumidores sin el servicio. Es cierto que la Argentina venía de una década con resultados económicos magros (hiperinflación incluída) que nos dejó con un nivel de riesgo inversor mayor al de los paises estables. Ésto, claramente, se terminaba reflejando en las mayores tarifas que el sector privado exigía para invertir en el país y, consecuentemente, la dificultad para evitar la marginación de los sectores mas humildes.

miércoles, 3 de febrero de 2010

Portugal, España, Grecia y la Union Monetaria

Este año estamos asistiendo al desacople de parte de la economías de la UE. Mientras Francia, Inglaterra y Alemania dan muestra de estar sobrepoiendose a la crisis, todavía hay paises que distan de alcanzar este objetivo.
¿Qué será lo que cause semejante divergencia en este grupo de países que cuentan con el mismo tipo de cambio nominal y por lo tanto, sin posibilad de utilizar la devaluación como herramienta expansiva?
Analizando a groso modolos réquisitos por los cuales sería conveniente ingresar a una Union monetaria, podemos arrojar luz a este interrogante.
Diremos que como requisito fundamental,un pais entrará a la Union si las ventajas de hacerlo superan a las de abstenerse.

Entre las ventajas encontramos:
Mayor eficiencia en el comercio
Movibilidad perfecta del factor trabajo
Ganancia de Credibilidad

Por otro lado, como principal desventaja encontramos la renuncia al manejo del tipo de cambio como herramienta anticíclica.

Para hacer que los beneficios superen a los costos, el país a ingresar debería trabajar sobre los 3 items de forma de asegurarse de exprimir al máximo las ganancias potenciales.
En este sentido, el país debería concetrarse en sus ventajas comparativas, utilizando un sistema impositivo cuyo diseño no distorsione los precios relativos y, de ser posible, apoyandolo con incentivos fiscales a la producción .Así, sería importante lograr cierta flexibilidad laboral para permitir mejor amortiguación de shocks y entonces alargar el horizonte temporal, fomentando inversiones productivas de largo plazo.

Para que la movilidad del factor trabajo pueda llevarse a la práctica de forma de actuar como mecanismo anticíclico (disminuye el desempleo en epocas de recesion), se debería elevar el nivel educativo en idiomas, de forma que el desempleado no encuentre dificultades para emigrar a paises con mejores perspectivas de corto plazo.

La ganancia de credibilidad, por su parte, debe ser acompañada con emisión de deuda y paralelamente con un sendero sostenible de deficit fiscal, el cual debería, a su vez, ser anticíclico.
El país nuevo debería ostentar niveles de deuda menores a aquel visto como nivel límite en la Union, de forma que a igual tasa, el mismo se vuelva atractivo comparado con los paises mas avanzados.

A su vez, durante el ciclo expansivo deberían utilizarse los fondos de la deuda para inversiones productivas que permitan aumentar la eficiencia y asi el PBI potencial. De esta forma, la deuda se irá repagando sola, y se crearan menores presiones para cuando el ciclo entre en la fase recesiva.

Por último, ademas de todolo anterior, hay que miniminzar la necesidad de flexibilidad cambiaria. Para ésto, es fundamental mantener la inflación a niveles iguales o menores al del resto de la Unión.

jueves, 28 de enero de 2010

Fondo del Bicentenario

Mas allá del efecto obvio que tendría la utilización de las reservas del Banco Central para pagar deuda, es decir, de permitir evitar un nuevo default, es importante ver un poco mas allá para discernir consecuencias no tan visibles.

El principal punto en contra de esta medida es la reconfirmación de el oportunismo del Gobierno para obtener financiamiento. Le tocó el turno a la ANSES, al campo vía mayores retenciones, al Peso vía devaluaciones contra el dolár (mientras los vecinos se aprecian), y al salario real vía el impuesto inflacionario.

A las claras se ve un patrón de medidas de política económicas sistemático, cuya principal característica es un timing ex post, es decir, una violación constante de las reglas de juego, que termina distorsionando la actividad económica cada vez mas.

Por ejemplo:

  • Cuando al campo le empezó a ir muy bien se le saca parte de sus ganancias con una suba de retenciones imprevista por todo el sector.
  • La devaluación va perjudicando los planes de inversión de los sectores necesitados de insumos importados, y aumenta las expectativas inflacionarias.
  • Lo de la Anses crea un desincentivo al ahorro ya que fomenta todos los incentivos viciados anteriores (devaluacón, inflación), confirmando un comportamiento oportunista y poco confiable por parte delgobierno.

Por último, lo del Fondo del Bicentenario, confirma toda ésta tendencia, dando una imagen internacional de que la Argentina hará siempre todo lo necesario para evitar un nuevo Default. Esto incluye violación de derechos de propiedad, lo cual no podrá ser bien visto por las empresas (extranjeras principalmente ya puede elegir donde ir) cuya inversion es tan necesaria.

Respecto del argumento de que ya se han usado reservas para pagar deuda, cabe aclarar que el efecto de hoy no sería ni por asomo parecido al que tuvimos cuando la Argentina estaba saliendo de la crisis del 2001.

En esta oportunidad, venimos creciendo al 7% durante 6 años. Dónde estan los frutos de este crecimiento? que hizo el gobierno con los recurosos que debería haber ahorrado?

Nuevamente, esto demuestra claramente el oportunismo del gobierno y simétricamente, que la Argentina va a seguir perdiendo en terminos relativos contra los demás paises emergentes que hacen bien las cosas.

No me preocupo demasiado ya que pienso que la imagen de nuestro país será revertida con el próximo gobierno. Mas bien el post apunta a mostrar que un comportamiento tan cortoplacista y prágmatico como éste no es sano para el futuro de la Argentina.